¿De dónde viene la inspiración a la hora de escribir?: El Bloqueo de Escritor (Parte II)

Bienvenido a la segunda parte de este pequeño especial, te aviso que estas en la segunda parte, si quieres leer la primera, pincha aquí. De lo contrario, bienvenido a la conclusión de este tema, cualquier duda o comentario, estaré feliz de atenderla en la zona de comentarios.


El síndrome de la pagina en blanco...

Una vez que ya tienes una idea, has logrado pensar en los personajes y has logrado superar el reto de las primeras páginas, parece ante ti que ya tienes todo lo necesario para ponerte a escribir sin descanso, pasas una página tras otra y justo por sorpresa, la idea que has logrado plasmar ha desaparecido o mejor dicho tus ganas de seguir parecen dispersas y no logras enfocarte en el papel. Entonces comienzas a navegar por internet, borrar cosas de tu disco duro e incluso sales a la calle a recibir el sol que no te ha dado en semanas y al regresar sigues divagando. Finalmente, te das cuenta que tienes problemas.

Agitas tu cabeza y quizás hasta te des algunos topes contra el escritorio, luego de una docena de golpes contra la madera y antes de que te desmayes por una contusión, miras los últimos renglones de tu escrito y te das cuenta que estas en una de las muchas partes emocionantes de la historia, la batalla final o el momento en el que la búsqueda de pistas te está llevando al clímax emocional de tu personaje principal. Sientes la emoción de nuevo y colocas tus manos frente a las teclas, pero no hay palabras nuevas en los renglones ni en tu cabeza, buscas nuevos adjetivos e ideas que te ayuden. Luego de algunos minutos sin lograr nada finalmente te enfadas y asestas media docena de golpes a la pobre pc o laptop que no tiene la culpa de nada.

Miras la hoja de nuevo y te preparas por segunda vez. Respiras y te enfadas aun mas luego de que en este nuevo intento ninguna palabra o párrafo llegue a convencerte totalmente, deseas continuar pero ya no logras dar más. La frustración finalmente ha terminado por consumirte.

Mis consejos principales ante este problema y antes de que agarres tu computadora a golpes por segunda ocasión son los siguientes:

1. Cálmate
2. Cierra el archivo de tu ordenador o aparta el papel de tu lado.

Y seguramente despues de leer mis dos consejos estaras:

¡¿Esos son consejos para ti?! 
¡¿Dime dónde vives iré por ti?!
¡Me robare tus gatos, me robare tus libros, me robare cada cosa que te importe!


Pero seamos francos, así son las cosas.


No hay peor sensación que el ahogo emocional que significa desear escribir y no sentir las palabras fluir como lo hacía momentos antes, pero entonces si aun deseas escribir porque estas en la parte más emocionante, ¿Cuál es el problema? Te preguntas a ti mismo y a tu subconsciente pero ninguna te da la respuesta.

Ya te has enojado contigo mismo por ese tropiezo y te encierras en tu frustración, pero pronto te darás
cuenta que eso no es la solución a nada y tampoco es el primer paso para salir de aquella pequeña prisión que es mucho más frágil de lo que tu mismo crees.

Pero si quieres consejos más detallados para encontrar la inspiración de regreso, ¡sigue leyendo!

1. Obligarte a escribir no hará que las palabras vuelvan a fluir. Esa es una verdad que mientras más intentes mientras te sientes así más corroboraras que obligarte no llevara a nada. 
Es preferible apartarte de tu historia por algunas horas o incluso unos días y pasar ese tiempo haciendo limpieza, saliendo, leyendo o incluso viendo televisión para despejarte lo más posible y promover que tus ideas regresen con calma. 

2. Al alejarte por unos momentos, puedes mantener en tu cabeza lo que has ya escrito y aquello que quieres escribir mientras imaginas la situación y visualizas en tu mente lo que ocurrira.
Esto servira bien para promover tu imaginación y que veas a su vez los pro y contras de llevar a cabo una situación en tu libro para mantener las acciones de los personajes lo más coherente posible.  
Esta opción es personalmente mi favorita, debido a que me considero una persona bastante hiperactiva y a la que le gusta tener miles de cosas que hacer para no aburrirse. 

3. ¡Relajate!
Trata de alejarte un poco de la historia por lo menos un par de horas, mirá televisión, lee ese libro que has abandonado, ve al cine o sal a charlar con algunos amigos, esto te ayudar a no pensar en la historia por unos momentos y con ello al volver a casa o simplemente inesperadamente durante esas actividades una vez más el deseo de escribir volvera en forma de una idea o simplemente el mero deseo por plantar tus manos en el teclado. 
Pero ante todo, debes mantenerte en lo posible lejos de la historia que estas realizando, piensa en ella si eso te hace sentir el apego emocional que sientes por la misma, pero el tiempo lejos te hará pensar en nuevas perspectivas y opciones que no habías vislumbrado. Tampoco te digo que abandones tu historia por meses o años, ¡por supuesto que no! Pero darle un respiro a ella y a ti mismo procurara que nuevas ideas y perspectivas aparezcan.

¿Qué pasa si luego de todo eso el bloqueo continua?

Lo que puedo sugerir en ese momento es que leas los ultimos dos a cinco capitulos escritos de tu historia y veas que esta marchando mal, el posible que el problema este racionalizado en el desarrollo de tus ideas. Sugiero  que al leer tu trabajo lo hagas sin pensar que tu eres quién lo ha escrito de esta manera obtendras una perspectiva fria y honesta. Recuerda que al lanzar un escrito serán otros quienes nos juzgen pero principalmente somos nosotros quienes debemos ser lo suficientemente criticos para admitir cuando estamos errados y mejorar en ello, lo importante es que nuestra historia nos guste a nosotros. Pero cuidado, no digo que te subestimes a ti mismo haciendo esto, solo digo que debes ser capaz de ver tus errores pues seguramente en algun punto de lo que has escrito tus ganas de escribir se nublaron debido a un momento en la historia que no logra convencerte a ti mismo, y si a ti no te convence, ¿cómo puedes esperar a convencer a los lectores?

Y para finalizar:

1. Te sugiero que pongas un lapso de unas horas dedicadas a escribir, una vez cumplido ese lapso, detente aunque quieras seguir escribiendo, así tu cabeza se mantendrá fría con tu historia y podrás siempre pensar en nuevas opciones a las que tu historia te este dando pie.

2. No te impidas soñas despierto. Imagina todas las situaciones en las que tus personajes se verían involucrados en su mundo o te gustaría que estuvieran aunque estos pensamientos no involucren nada del mundo que has creado para ellos, este es un ejercicio realmente bueno, así mismo es una manera realmente eficaz de ejercitar muy bien tu imaginación.

3. Cuando te sientes a escribir hazlo lo más tranquilo que puedas, si tu mente esta estresada pensando en exámenes finales o problemas de índole amorosa o similares que te abstraigan constantemente, y si bien la escritura puede funcionar maravillosamente como desahogo, es posible que tus emociones negativas te lleven a encontrarte con el tan odiado bloqueo mental mientras que tu mente busca la resolución a un problema en tu vida y prefieres inconscientemente darle prioridad a ese que a resolver los de tu personaje.


*** 

De antemano espero que esto te haya ayudado, no me considero experta ni nada por el estilo, pero se me antojo hacer un pequeño trabajo con lecciones que he adquirido personalmente a lo largo de los años en espera de que ayuden a otros.

Ante todo, buena suerte a todos aquellos que por alguna u otra razón han dado con mi blog y esta serie de post en espera de que le sea útil todo lo aquí plasmado.

Otros post de interes

0 comments